Entrevista 2017 - Diario El Ciudadano / Chile











- ¿Cómo y cuándo nace el Colectivo Arte Bajo Cero? Unas pocas líneas.

Arte Bajo Cero nace el año 2010 en Buenos Aires, con la idea de hacer una travesía artística por la Patagonia, que para nosotros tenía un carácter heroico. Queríamos explorar el territorio, su historia y fenómenos sociales, lo que daría como resultado un documental. Invitamos a otros artistas y profesionales de Chile y Argentina. Recibimos más de 30 patrocinios de instituciones de ambos países, entre ellos UNESCO. Fue declarado de interés cultural por la Presidencia en Argentina y proyecto Bicentenario en Chile;  pero fue un no rotundo por parte de los fondos públicos. Una contradicción total entre el apoyo simbólico y el apoyo concreto. Esto permitió darnos cuenta del entramado e intereses ocultos que hay detrás de ese territorio, sobre todo de potencias foráneas.




EXPEDIENTE

-¿Por qué EXPEDIENTE posee un resumen ejecutivo? Quiero decir ¿Siguen la misma lógica del Estado para asimilar el proceso artístico como parte del aparato difusor?

Claro, es una forma de hacer evidente las prácticas culturales del Estado. EXPEDIENTE denuncia un trabajo de inteligencia escalofriante, que se estandariza en el arte de formulario. Es una invitación a reflexionar sobre esa burocracia neoliberal post-dictadura instalada en el ejercicio del poder. También habla de cómo podemos enfrentar esa maquinaria, cuáles son sus patrones constructivos y decisorios, en qué principios se fundamenta. La burocracia está muy bien ordenada para lograr el decaimiento y la frustración en el intento de obtener algo de ella. Su caos aparente y su simulación de absurdidad, son mecanismos bien ajustados para lograr lo que desean. EXPEDIENTE se organiza tomando como base los procesos de selección de proyectos en fondos concursables, que, extrañamente, son procesos análogos a un procedimiento judicial, con demandas, recursos, sentencias, etc. Claramente son procesos de selección que más responden a lograr juicios de valor de unos jueces, que elegir aquellos proyectos que cumplan con ciertos estándares culturales claramente definidos.



-¿Qué repercusión tuvo la muestra de Expediente en Galería Arcimboldo en Buenos Aires? ¿Y en Chile?.
 
La propuesta desde un principio le gustó mucho a la directora de la Galería. Mostramos una gran cantidad de documentos, actos y resoluciones, destacando cartas de muchas instituciones que apoyaban el proyecto que pretendíamos hacer en la Patagonia, junto a las fichas de evaluación del FONDART. La mayoría de estas fichas nos evaluaron mal. De este modo, convertimos el fracaso en algo potente, en un fracaso que no determinó la realización o no de una idea determinada.
El público argentino quedó sorprendido con la cantidad de documentos y trámites que hay detrás de una gestión artística. Asistieron estudiantes, curadores, artistas, gestores, sociólogos y otros agentes.  Nos sorprendió la visita de una estudiante que comentó que había sido invitada por su profesora a ver la muestra, y que nos citaba en sus clases como modelo de colectivo autogestionado.
Ésta fue la primera etapa, julio de 2016, y fue excelente. Luego en noviembre fuimos seleccionados en la muestra FASE 8 Pensar la Praxis “Encuentro de arte-ciencia-tecnología” en el Centro Cultural Recoleta, un lugar muy concurrido del polo cultural de Buenos Aires, donde concurre un público más diverso, y explotó. Ironizamos con una instalación que parecía un santuario, donde se puede depositar la fe y las ilusiones de concreción de ideas y proyectos. En Chile aún no mostramos nada. Nos gustaría hacerlo, ya que toda nuestra trayectoria ha sido en el extranjero.



-¿La ilusión retórica de derecho a igualdad podría transformarse en una demanda real hacia el Estado y sus políticas culturales?

Nuestra demanda se estructura a partir de un derecho que se tiene, o se piensa tener. Éste sería la prerrogativa de todos los individuos de desarrollar sus anhelos particulares. En nuestro caso, la comunicación de ideas a través de un lenguaje visual. Se relata y se hace ver el fundamento de la pretensión, su estructura filosófica, sociológica y artística. Los objetivos buscados y la forma en que se hará.

Las  políticas en artes visuales son realmente vergonzosas. Existe un maltrato a los creadores a nivel regional de parte de la institucionalidad cultural. Los espacios de exhibición oficiales, en su mayoría, contienen un nivel muy precario de funcionamiento, debido a la ausencia del Estado. No cuentan con recursos suficientes, no contemplan traslados, seguros, derechos de exhibición, derechos de reproducción de imagen, y además te hacen firmar un documento en el que se especifica que no se responsabilizan por daños o hurtos. El año 2013 hicimos un muestra binacional en el Centro Cultural Matta-Embajada de Chile en Argentina-, y nos hicieron pagar los honorarios del personal de seguridad. Para no creerlo.
Las condiciones que debemos enfrentar para poder realizar un trabajo óptimo son adversas, salvo contadas excepciones. La realización depende siempre de nosotros. Habría que preguntarse para qué existen tantos centros culturales y museos.

Hay una estructura que controla los hechos y actos constitutivos y constructivos del arte, que contiene en sí una paradoja absurda. Tómese nota consciente de lo siguiente, que puede ser comprobado fácilmente:
Existen espacios oficiales que amparan, o desamparan, las manifestaciones visuales del arte, sea museo, galería, centro cultural y otros. Estos espacios requieren, de manera ineludible, contar con financiamiento. Este financiamiento logra mantener a dicha estructura cumpliendo el único fin que le es propio: exhibir las manifestaciones visuales del arte. Para que esta estructura cumpla su fin propio, requiere que una serie de actores desempeñen ciertas funciones.
El actor principal (el artista) es quien construye la obra que será exhibida. Este primer hecho de construcción de obra, da cabida a la existencia de los otros actores secundarios: curador, gestor, montajista, periodista, diseñador, personal de aseo, etc.
En general los actores mencionados, menos el actor principal, ven sus funciones remuneradas, y generalmente con un contrato de por medio, que les permite seguir ejerciendo dichas funciones.
El actor principal, quien construye el hecho u objeto que permite que dichos actores secundarios sean remunerados, no recibe, en general, remuneración alguna por ello.
Esto es una paradoja. La manera indirecta de remuneración, que también es un simulacro de recompensa, está dada por la romántica esperanza de proyección que dichos espacios de comunicación visual lograrían para el actor principal.  Tal vez es el momento de hacer un PARO de artistas para mejorar las condiciones en que trabajamos.



- Son un colectivo trasandino que trabaja con ejes temáticos como son frontera, sociedad y territorio. ¿Cómo aplica en la migración de una obra en su derecho a ser difundida?.

Nuestro proceso ha contado con la colaboración del curador argentino Vatiu Nicolas Koralsky y la investigadora chilena Isabel Salazar, junto a un diálogo activo con otros agentes culturales, tanto de artes visuales como de ciencias sociales y humanidades, que busca conformar un cuerpo de pensamiento que contenga la permeabilidad de las problemáticas que acontecen en el territorio. Cuando trabajas una obra, con ideas y pensamientos  que involucran problemáticas regionales, y que contienen visiones comunes, logras tocar la fibra de los sujetos y atraviesas las fronteras.



-¿Cuál es el siguiente paso de EXPEDIENTE? ¿O se da por finalizado el trámite?.

El trámite no tiene fin mientras sigan dándose las mismas dinámicas. EXPEDIENTE es una obra en constante renovación y con una clara voluntad de crecimiento. Es también una bitácora de nuestro trabajo y su relación con el aparato administrativo, y esa relación continúa en el tiempo. El siguiente paso será cristalizarlo y hacerlo lenguaje. 



LA RESPONSABILIDAD DEL EJERCICIO

-¿Cómo una acción se transforma en un proyecto? Hablemos de FRÁGIL.

FRÁGIL  parte de una idea muy simple: Llevar a gran formato la tipografía de embalajes y cajas de productos, y sustituir dicho producto por un paisaje macro. En principio fue un experimento de observación, de cómo se comportaba el espacio con ese aviso.  Luego se transformó en proyecto cuando comenzamos a desplazar la acción a diversos territorios, y comenzamos a probar en un formato de cintas de embalaje, pero a gran escala, para envolver edificios. Lo envuelto fue la precariedad de la instituciones públicas, fruto de los avances neoliberales en la región. En ese ejercicio nos dimos cuenta de las múltiples posibilidades de resignificación del material.

 
- Desde el 2010 a la fecha han desarrollado varias fases en la producción, en Línea Discontinua advierten: “Llegar a la orilla es el signo del progreso. Vivir en la orilla, mancha de marginalidad”. ¿Se pueden referir a esto brevemente?
Todo sistema contiene necesariamente dinámicas de inclusión/exclusión. Venimos trabajando con esto desde Ambientes Artificiales. Para quien habita en los bordes, el acceso a la territorialidad, que se distancia de los márgenes, es posibilidad de progreso, de plena ciudadanía. Línea Discontinua trabaja con el elemento más básico que conoce la disciplina del dibujo, la línea. Dentro de esta idea, la obra apela a producir una disección y apropiación arbitraria del territorio. Entonces, la dinámica tratada es lo que se produce en distintos ámbitos de la sociedad, sea mercantil o no. Lo otro es la brutal determinación de los ámbitos del territorio (en su sentido amplio) que son habitables por tal o cual sujeto, y de tal o cual manera.





- En Sujetos Periféricos está la problemática de la memoria, el luto, el olvido en el patio de fusilados de la cárcel de Miguelete. Y han puesto cruces. ¿Cómo se imaginan la defunción del arte?










Sujetos Periféricos fue un site specific en la Ex Cárcel de Miguelete, que actualmente es el Espacio de Arte Contemporáneo (EAC) de Uruguay. La presencia católica a través de cruces montadas en el Patio de los Fusilados fue una lectura de los procesos de administración de la vida y la muerte.
No imaginamos la muerte del arte, porque es una vital expresión de ideas y pensamientos, que al nacer responde y es determinado por un contexto territorial-social-cultural, a la vez que lo determina, comenzando a formar parte de su epidermis. Además se ha hecho una herramienta del poder económico-político para lavar imagen y dinero, entretener y controlar población, entre otros. Y un gran negocio para todas las universidades que dan la carrera de arte en Chile, gran ilusión y estafa. Tal vez para algunos, el arte muere cuando no hay financiamiento!



-Ambientes Artificiales es una exposición donde el espectador asiste a la comprobación capitalista del control de sus cuerpos mediante el acceso a una cabina, que una vez dentro, se climatiza con el ambiente artificial que existe al interior, con el fin de dar comodidad a la breve estancia conceptual. ¿Está bastante climatizado el hacer artístico chileno? ¿No llevar a cabo una obra sin financiamiento Fondart limita la acción y difusión de la misma? ¿Cómo perciben el arte periférico en este sentido? ¿Qué colectivos amigos trabajan en la misma línea que ustedes?

El hacer artístico chileno está bastante acondicionado. El Estado, con su política cultural que media a través del FONDART, reacomoda propuestas, las dulcifica y marca el paso de la producción artística: regula la conducta y domestica al creador. Logra construir un paisaje homogéneo y sofisticado, donde la pertenencia a determinado círculo permite la sobrevivencia domada. El arte que se resiste a la frustración desde los bordes tensiona este paisaje, denuncia, al tiempo que se autogestiona y prescinde de la limosna.

Al FONDART nos presentamos por lo menos 2 veces por año desde que comenzamos, y generalmente postulamos a la línea de circulación internacional. El mismo se llama Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes. ¿Cómo es posible que esta línea no contemple gastos de honorarios, y te exijan el 15 % de cofinanciamiento obligatorio? ¿Esto pretende lograr el desarrollo cultural de un país? Es un panorama adverso, porque tienes que enfrentar al monstruo burocrático y sus redes de poder. Trabajar sin financiamiento para producir obra y luego exhibirla es un doble desafío. Hemos aprendido a trabajar desde la precariedad. Nos colabora mucha gente de forma voluntaria. Nuestras producciones de obra y muestras donde integramos a otros artistas se han difundido en muchos medios; catálogos, diarios, radios y web.

Somos amigos del Colectivo ÚltimaEsperanza de Punta Arenas, ellos recorren los glaciares de esa región, explorando ejes como identidad y memoria. El 2015 los invitamos a una muestra en el EAC de Uruguay, donde también convocamos a otros artistas de Argentina, Brasil, Ecuador, Colombia, México y Venezuela. Luego ellos nos invitaron a su Encuentro Internacional de Arte Contemporáneo y Nuevos Medios (LUMEN), y este 2017 compartiremos otra muestra que organizamos en Boston-USA. 


POR PIA SOMMER
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